Se entiende a la danza social como una
práctica corporal, estética y expresiva, con contenido significante en lo
cultural vinculado a la identidad, e investida de una función social que
facilita instancias de relación comunitaria. Esta forma de danza surge de una profunda necesidad de crear un
lenguaje a través del cual los sujetos
puedan comunicarse sin palabras. Se encuadra dentro de las danzas de
ocio y se adapta a la música de cada época. Esta práctica pretende recuperar a
la danza como una experiencia lúdica y sana, alejada de etiquetas y
rigurosidades.
La danza social encuentra vínculos y
diferencias con el folclore. Se nutre de las danzas tradicionales como
antecedente histórico y, como práctica social se encuentra vinculada a ellas
del mismo modo que nuestro presente no puede ser comprendido inde-pendientemente
del pasado. Pero se diferencia de las danzas folclóricas en que no son
institucionalmente aprobadas, es el conjunto social y no las instituciones las
que determinan en forma coyuntural y dinámica cuáles son las Danzas Sociales;
al tiempo que están históricamente determinadas, al punto de que no pueden ser
comprendidas independientemente del contexto social. Las Danzas Sociales tienen
un contenido dinámico, no estático, y se definen más por su uso (vinculado a
los ritos de relación comunitaria y expresión sociopolítica) que por su
contenido, el cual va cambiando constantemente.
No existen límites estrictos entre
Danzas Sociales y Folclore. Una Danza Folclórica puede ser una Danza Social en
determinado contexto geográfico-temporal, y una danza social puede ser
instituida como folclórica al ser integrada por las instituciones sociales como
símbolo o tradición. Pero a diferencia de las danzas folclóricas, más estables
e institucionalizadas; las Danzas Sociales son más dinámicas y socialmente
determinadas.
Entender a las Danzas Sociales como
contenido, es visualizarlas como creación sociocultural. Las Danzas Sociales
son, para la comunidad, portadoras de valor cultural y simbólico, estético y
expresivo de su realidad y su identidad colectiva. Conocerlas y comprenderlas
es una forma de conocer y comprender la sociedad, así como practicarlas es una
herramienta de integración y participación en lo comunitario.
Enfocar a las Danzas Sociales como
estrategia pedagógica, implica el abordaje de este contenido vinculado a
promover formas que faciliten la incorporación de los sujetos al mundo social y
cultural. En la medida que se susciten estas posibilidades de acceso y disfrute
de prácticas que promuevan el acercamiento a bienes socioculturales, serán
mayores las oportunidades educativas de los sujetos involucrados en las mismas.
Se busca de este modo implementar una
pedagogía democrática del proceso educativo, donde son los sujetos-objetos de
la educación los que poseen estas prácticas aprehendidas que no les son ajenas
ni indiferentes, sino que les son próximas y representativas; y a través de
ellas se pueden compartir conocimientos y contenidos culturales posibles de ser
recreados y resignificados en las clases de danza, educación física, historia,
música y otros espacios curriculares.
En los diferentes cursos que ofrecemos sugerimos el abordaje de los
contenidos vinculados a la comprensión de los sentidos sociales y
culturales atribuidos a estas formas de danza, y el descubrimiento y creación
de nuevos movimientos que constituyen saberes a ser enseñados y aprendidos.
Ejemplos de Danzas Sociales más conocidas:
-Tango
-Salsa
-Merengue
-Cuarteto cordobés
-Cumbia (Satafesina, Villera)
-Cha cha cha
-Bachata
-Reggaeton
-Brasilero (axé)
Ejemplos de Danzas Sociales más conocidas:
-Tango
-Salsa
-Merengue
-Cuarteto cordobés
-Cumbia (Satafesina, Villera)
-Cha cha cha
-Bachata
-Reggaeton
-Brasilero (axé)
Entre otras.